Me puse a pensar que hay un momento en el que uno se da cuenta que ya no quiere ser la mujer o el hombre que un día fue, y vemos que hemos cambiado mucho y no podemos regresar a ser como antes si ya as dado un paso muy alto, y lo hemos hecho gracias a personas o a una sola como en mi caso, pero no lo hacemos por esa persona o esas personas, lo hacemos por que nos ayudaron a ver como era que estábamos de seguro hemos estado mal en varios ángulos de nuestras vidas no?
Esa persona fue la respuesta a muchas de nuestras preguntas, son personas en las que podemos confiar, no precisamente esa persona debe ser un novio o novia puede ser una persona que as llegado a querer demasiado, esa que te entrega ese sentimiento sin desinterés, que se acercan a nosotros así sin importarles lo que le puedas devolver están ahí contigo que poco a poco se van volviendo parte importante en tu vida ya que desasen esa rutina destructiva que nos habíamos trazado todos los días.
Muchas veces queremos decirles que no podríamos acostumbrarnos a ese amor a ese querer que ellos nos dan no lo decimos con nuestros actos basta pues ellos se encargan en que no pensemos de esa manera es mas si se alejan pues se extraña cada momento y los terminamos buscando o hablarles de nuevo y queremos mas tiempo con esa persona.
Se aprende a vernos como nos ven esas personas, y es exactamente lo que siempre hemos querido pero estábamos mas interesados en ser diferentes totalmente diferentes para encajar perfectamente con los demás pero esa persona nos enseña a ser nosotros mismos, no es que la esencia de ellos nos queda un poco en nosotros por que no es así ni tampoco digo que sin esa persona seriamos otros, es gracias a su amor a su entrega sin interés ese querer que crece en nosotros, nos convertimos en la persona que siempre fuimos pero que tratábamos de ocultarla, y lo hacemos para aprovechar todas las cosas lindas que nos ofrecen.
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